El mes de marzo, en la obra social Ker Saorengo, Casa de Tod@s en la ciudad de León, prometía. Teníamos varias actividades programadas, una de ellas, que sí que pudimos hacer, fue un “flashmob” en la plaza de la Catedral, el día 6 de marzo, en la que “nuestras” niñas de flamenco junto con otras 30 personas realizaron una exhibición de baile flamenco para conmemorar el Día internacional de la mujer trabajadora.
Esta fue la última actividad que pudimos realizar. En aquel momento no nos imaginábamos las repercusiones que iba a tener el COVID-19. De hecho, empezamos a programar una tarde de juegos y actividades en el aula de informática del Colegio Marista Champagnat. Pero todos los planes se truncaron esa semana que empezaba el 9 de marzo. De hecho, nos anticipamos a la mayor parte de centros educativos de León, y decidimos cesar las actividades.
Fue una decisión muy difícil, pero necesaria por el bien de la seguridad de niños y voluntarios. Fue difícil debido a la naturaleza de los usuarios del proyecto; la mayoría son población gitana y, por su cultura, pasan mucho tiempo socializando “en la calle”. A eso se le une la circunstancia de que muchos de ellos muestran dificultades en el trabajo académico. Este tiempo está siendo difícil especialmente para los niños, pero para los niños de Ker Saorengo… diría que mucho más.
El Centro Cívico Ventas Oeste, que es el lugar donde realizamos las actividades, cerró sus puertas el día 16 de marzo, y desde entonces no hemos vuelto a ver presencialmente a los niños. Pero eso no ha impedido que sigamos en contacto.
Tenemos diversos grupos de chats en los que nos comunicamos casi a diario los voluntarios y diferentes trabajadores y educadores involucrados en el proyecto y vamos conociendo informaciones que pueden ser útiles para las familias. También hemos realizado un vídeo para saludar a nuestros niños y niñas y que se sigan sintiendo parte de “Casa de Tod@s”. Por otro lado, el profesor de baile flamenco graba algunos pasos de baile a modo de “masterclass” y los manda a las niñas que atienden sus clases. También nos hemos ofrecido para resolver cualquier duda que puedan tener los participantes, canalizándolo a través del profesor de baile y el entrenador de boxeo.
Os deseo que estéis todos bien, y… ¡Hasta pronto!
H. Antonio Sánchez, coordinador de la Fundación Montagne para el Proyecto Ker Saorengo